... cada kilómetro un mar de felicidad, cada entorno un referente para los sentidos, y cada persona, el puto mundo.



De Ruta Etílica, Agosto 2006


Una propuesta de nuestra fémina favorita que llegó a buen puerto: visitar las bodegas Antaño en la localidad de Rueda, Valladolid.
Ni cortos ni perezosos arrancamos las nenas un sábado por la mañana y nos dirigimos raudos y veloces, con paradita incluida para desayunar, a empaparnos de la cultura del vino desde su recogida en forma de uva, hasta los diferentes procesos que la convertirán en un estupendo caldo, altamente gratificante...
Después de la visita, y como el hambre aprieta, sometemos a un lechal de la tierra al tercer grado correspondiente con resultado más que satisfactorio.
Café, copa y de vuelta a los Madriles con los ánimos encendidos ja, ja...

Alguna llegó en coche y continuó en moto.

Nuestra guía preferida, esa Patri!.

Que mirará el cuñao?.

Esto es el paraíso, oh my god!.

Qué feliz está, no me extraña...

Apariciones en la bodega...

... e iluminados sedientos.

La profesora con los alumnos ja, ja...

La sala de fermentación y maduración una de las más amplias.

Esto se llama corporativismo laboral!.

Y a la salida, como no podía ser de otra manera, calentamiento global a base de degustación de cosechas propias y listos para someter al lechal al tercer grado.

5 comentarios:

txinomandinga dijo...

Ya te digo si es el paraiso, rodeado de esas botellonas....oh my god...oh my re-god!...ajajjaa
muy bueno mamonaxoooo...jejeje...
a tu salud esa copita!!

James dijo...

Mola, buena escapada. Eso es montarselo bien, Aprender y beber junto a una guia guapetona.
Salud!

elblogderaga dijo...

jajaja pareceis los niños del colegio de la saye jajaja bena cronica como siempre!!
saludos!!

Carlos Tizón dijo...

amigo, visitar las bodegas siempre es motivo de celebracion y mas si hay degustacion, anda mira que bonito me ha quedado

seguro que los pasaseis cojonudo

saludo

FREEBIRDRONNIE dijo...

Si os gusta el vino y todo lo que conlleva, no dudéis en visitar una buena bodega en inmejorable compañía, repetiréis!.

Un abrazo a los cuatro y gracias por la visita.