... cada kilómetro un mar de felicidad, cada entorno un referente para los sentidos, y cada persona, el puto mundo.



Pendejos En La Seu, Disolutos En La Alsacia, Julio 2010


Plenamente satisfactorio ha sido el retorno por tierras europeas, comenzando por el enérgico encuentro con el incalificable Capitain Poon, Josu para los amigos, el periplo descubriendo la desconocida y muy recomendable Alsacia y Lorena en tierras francesas, la Selva Negra germana en todo su esplendor de colores, eh Pelao? ja, ja, nuestro primer contacto con el Eurorun en tierras germanas y terminando con unos días de esparcimiento y descanso en nuestra querida Krivoklat de la República Checa, solo puedo agradecer a mi nena y a mi infatigable Pelao estas dos semanas de pura ruta motorista, viviendo por y para la moto, pero sobre todo, experimentando en primera persona la satisfacción por descubrir nuevos territorios y nuevas gentes que hasta la fecha solo conocía por los libros de geografía e historia... KEEP ON RIDIN'!!.

DÍA 1
Madrid-Lérida (465 kms)

Nunca aprenderé a serenarme antes de un viaje, una hora antes ya estoy cargando a mi nena y comprobando las sujeciones, y es que los nervios están más presentes que nunca. En esta ocasión mi nena viste un doble disco delantero recién montado que hará las delicias del que cabalga, y de que manera, brutal!, también, y a petición de mi ángel de la guarda, la he ornamentado con un San Cristóbal que ha cumplido con creces su cometido, o no Pelao? ja, ja... y de esta manera y como ya viene siendo habitual noche de Rocanrol en nuestro hotel favorito con el beneplácito de nuestro, a partir de ahora, recepcionista favorito...

Vestida con sus mejores galas mi nena aguarda preparada para el baile...

... pero antes, mi santo custodio.

En ruta por la A-2 paradita en el "103" a refrescar el gaznate y comentar las primeras impresiones: Pelao no chupa y servidor no mp3, me cago en too!...

Creo que siempre nos dan la misma habitación, no se, el año que viene saldremos de dudas... y mientras tanto, birras y charlas mil incluyendo los primeros destinos confirmados... por fin en ruta!.


DÍA 2
Lérida-Seo de Urgel (300 kms)

Empezamos bien la jornada, joder, aviso a Josu que salimos a su encuentro y la hora teórica que nos separa se convierte en toda una odisea por la jodida mala señalización de la AP-2, si es que no aprendemos, así que con un par de horas de retraso el señor Poon y Lokillo (a Yunque le conoceremos más tarde, ja, ja) nos reciben con unas cervezas bien frías y un cierto.. mosqueo? ja, ja, para nada, por fin hemos conseguido rubricar nuestra amistad con esas birras que teníamos pendientes, y de esta guisa carretera hacia La Seu con un calor tormentoso, presagio de experiencias inolvidables...

Encuentro entre pendejos...

... resultado: encuentro entre hermanos.

Dicho y hecho, nos ponemos camino de La Seu disfrutando de la compañía...

... de la ruta...

... y de las ganas de compartir...

Ja, ja, esta no te la esperabas, eh Capi?.

Después de despedirnos del Lokillo en ruta llegamos a la morada de Josu y Mari, allí pernoctaremos pero no sin antes disfrutar de una comida a la altura de los comensales, a la tarde y hasta altas horas de la madrugada los cánticos regionales y los abrazos harán acto de presencia síntoma de que algo poderoso ha pasado entre tipos tan distantes pero tan cercanos, y joder, mola!, es por esto y por mucho más por lo que siempre merece la pena rodar, complicidad y buen rollo sin tener que dar explicaciones, gracias mamonazos!.
Calentando motores y repostando ja, jaa...

... mientras las protagonistas descansan.

También hubo tiempo para el turismo histórico, las antiguas mesuras que servían para medir la cantidad de trigo a repartir han quedado integradas en el casco urbano de la ciudad.

La actual Catedral de Santa María, de estilo claramente románico, comenzó a levantarse a principios del siglo XII y nunca fue terminada...

... pero nosotros sí terminamos, y de que manera! ja, ja.


DÍA 3
Seo de Urgel-L'Hospitalet-près-l'Andorre (Francia) (75 kms)

Tras despedirnos de nuestros anfitriones dudamos en iniciar ruta dirección Toulouse debido a las torrenciales lluvias que asolan el Pirineo, así que nos armamos con el traje de agua y tras una breve charla con un harlysta holandés en una gasolinera iniciamos el ascenso de Andorra. Después de una hora de ruta el frío y la humedad comienzan a hacer mella en nuestros maltrechos cuerpos, y es por ello, pero sobre todo ante la imposibilidad de seguir avanzando debido a un desprendimiento de tierras en la carretera, que retrocedamos sobre nuestros propios pasos en busca desesperada de un sitio donde pernoctar. Esta vez San Cristóbal nos echa una mano y encontramos habitación en esta pequeña localidad del territorio francés... salvados!.

En nuestra habitación podemos descansar y replantear la ruta de mañana...

... pero antes una cena casera a cargo de unas entrañables abuelitas que nos hacen sentir como en nuestra propia casa, y después, un vistazo al cielo con la esperanza de que la etapa de mañana sea fructífera en kms.


DÍA 4
L'Hospitalet-près-l'Andorre-Tournus (865 kms)

El día ha amanecido radiante y la carretera abierta, así que a rodar como posesos. La jornada se sucede entre autopistas francesas y al caer la tarde comenzamos a buscar refugio, esta vez el hotel formula 1 no nos sirve, la recepcionista nos dice que no hay luz y además una enorme antena de telefonía junto al hotel interfiere con la llave de la moto y esta se pone a pitar sin descanso, así que empujándola hasta fuera del radio de acción consigo arrancarla y hasta el siguiente pueblo Tournus, en plena Borgoña, donde disfrutaremos de un estupendo aparca hotel pero sobre todo de una cena a la altura de la mejor cocina francesa brindada por el restaurante Le Relais de L'Abbaye...

En Ax les Thermes el cielo se abre y la jornada nos ofrece la posibilidad de degustar muchos y sabrosos kms, por supuesto aceptamos la invitación.

Los Pirineos franceses nos acompañan durante un trecho del camino...

... pero este pequeño dinosaurio prefiere continuar ruta en solitario.

En una de las numerosas paradas para repostar o simplemente echar un cigarrillo, mi casco me recuerda que la Seu no queda aun muy lejos... mejor salir echando leches! ja, ja...

Nuestro aparca hotel favorito...

... y la Abadía de Saint Philibert del siglo XI nos reciben esta noche.


DÍA 5
Tournus-Saulxures (525 kms)

Nos adentramos por fin en La Alsacia y Lorena, pero antes un pequeño susto a cargo de un camión que revienta una de sus ruedas y hace que por un instante pensemos que uno de los dos hemos reventado la moto, joder! ja, ja. Durante toda la jornada nos dedicaremos a rodar por carreteras secundarias inmersas en lo más profundo de la región Phalsbourg, Lutzelbourg, Hultehouse, Dabo, Wangenbourg o Niederhaslach son localidades donde la vida sucede sin ajetreos, donde sus gentes disfrutan del entorno a ritmo de paseos a pie o en bici y nos recuerdan que nos encontramos aun en territorio francés, quién lo diría!.

A la entrada de Phalsbourg este viejo y maltrecho Sherman nos avisa de que accedemos a una de las principales zonas de incursión del ejercito alemán durante la 2ª guerra mundial.

Pueden apreciarse los agujeros creados por la artillería enemiga, acojonante!.

La primera y última vez que lavo a la nena en ruta, no sirve de nada, enseguida pillas una nube y todo el trabajo a tomar por culo, en fin...

Presidiendo la Plaza de Armas de Phalsbourg se encuentra la imponente Iglesia neogótica de Nuestra Señora-La Moselle. Todo el pueblo recuerda a aquellos pueblos de las pelis de guerra, casitas bajas pero de aspecto señorial, y las gentes haciendo vida en la calle...

En una terraza de la citada Plaza nos avituallamos a base de fiambres de la zona y ensalada y probamos su cerveza, muy buena por cierto, se nota el pasado germano, pero sobre todo nos llama la atención la naturalidad con que los paisanos se defienden tanto en francés como en alemán, por un momento mi mente se transporta a aquellos fatídicos años, pero en seguida vuelvo al presente al rodar por carreteras rodeadas de espesos bosques y firme irregular.

Nos encontramos en Lutzelbourg en el alto Rhin...

... para desde allí dirigirnos a través de un sendero en tierra al Castillo de Geroldsek.

El Chateau data del siglo XII y en la actualidad se encuentra en ruinas aunque mantiene su porte señorial gracias a que combina su función de fortaleza...

Desde lo más alto del castillo se controla todo el valle bañado por el río Rhin.

... y morada.

Nos permitimos rodar sin cascos durante unos kilómetros aprovechando el buen tiempo y las reducidas velocidades que se adoptan en este tipo de carreteras de montaña, por un rato nos sentimos totalmente integrados con el paisaje, sí ya se, pero que coño, mola!.

Luciendo calvas llegamos a la ciudad de Dabo famosa en toda Europa por la iglesia dedicada al Papa Leo IX que de forma tan poderosa se cierne sobre lo más alto de la montaña. Sin embargo el puto hotel construido a su vera no se a quien va dedicado, pandilla de especuladores...

Continuamos ruta (y no me cansaré de repetirlo) atravesando espesos bosques que amansan el espíritu del guerrero más fiero.

Somos bienvenidos a la comuna francesa de Wangenbourg en el bajo Rhin, cojonudo!.

Esta porque siempre queda bonita, pero son igualicas a las españolas...

En el centro de la ciudad la Iglesia de Sainte Marie de l'Assomption...

... y en sus afueras el Castillo, siglo XIII.

Primeras gotas de tormenta y la tarde que se nos echa encima hacen que solo nos detengamos en la ciudad de Niederhaslach para fotografiar la Colegiala de Saint Florent, me llama poderosamente la atención su arquitectura tan refinada a la par que robusta, y después...

... noche en otra "perita en dulce", esta vez, en la localidad de Saulxures y bajo el nombre de La Belle Vue. Que decir de este magnífico hotel en medio de la Alsacia y de su exquisito restaurante solo apto para comensales con ganas de disfrutar de la más selecta gastronomía francesa, pues eso!.


DÍA 6
Saulxures-Titisee (Alemania) (180 kms)

Despues de saber de la victoria española en futbol sobre Chile y con la resaca gastronómica aun en nuestras mentes, continuamos ruta por La Alsacia francesa del bajo Rhin, Maisonsgoutte, St. Martin, Chatenois, Orschwiller para a continuación adentrarnos en territorio germano, y más en concreto, en La Selva Negra. Se suceden de esta manera localidades como Waldkirch y Titisse que se encuentran rodeadas de bosques, montañas y calor, mucho calor...

No tenemos prisa por avanzar, frente a nuestros ojos se suceden espacios abiertos que nos transmiten calma y una extraña sensación de libertad.

En la localidad de Maisonsgoutte las primeras casas de campo coloreadas nos anuncian lo que será desde ahora nuestra ruta entre La Alsacia y La Selva Negra.

Erigida en plena travesía se encuentra la Iglesia de Saint Antoine, siglo XVI.

En St. Martin el mercadillo da vida a sus calles...

... o no? ja, ja...

... y vistiendo de colores al entorno, una pasada!.

Con la mochila a la espalda, digo, con los bartulos sobre la trasera, se respira campo por los cuatro costados.

La localidad de Chatenois nos reserva algunas estampas de cuento...

... calles impolutas y en calma solo alteradas a nuestro paso...

... detalles decorativos de lo más minimalista...

... pero sobre todo colores, muchos colores.

Muy cerquita en la comuna de Orschwiller y en lo más alto se encuentra el grandioso Castillo de Haut-Koenigsbourg...

... pero primero un colega en side-car, vsssss...

Data del siglo XII y como cita la Wikipedia convertido en refugio de los llamados caballeros bandoleros (chevaliers brigands) que asolaron los campos de Alsacia durante la segunda mitad del siglo XV, el castillo fue asaltado e incendiado por una fuerza de 500 soldados y piezas de artillería, a instancias de las ciudades de Estrasburgo, Colmar y Basilea.

Su puerta de acceso al interior inquieta a primera vista.

Supongo que el vino no precisaba de racionamiento alguno, ja, ja.

El interior de las estancias decoradas en finas maderas, contrasta con los castillos y fortalezas españolas en las que se simplemente se labraba la piedra de los muros.

Armamento de infantería preparado para el combate.

Alguna de las piezas de artillería...

... para la defensa del perímetro exterior.

Esta se lleva la palma, pedazo de cañón!.

Viviendas y estancias en el patio interior. Realmente el castillo era como una pequeña ciudadela con sus establos, estancias para trabajadores y soldados, almacenes de víveres, en definitiva todo para aguantar un largo asedio por parte de tus enemigos más acérrimos.

Atrás hemos dejado la ciudad de Waldkirch y nos adentramos en lo más verde de La Selva Negra, nos avisan de que andemos con ojo, porqué será?.
Os lo imaginábais así?.

O así!.

Los avisos eran ciertos, alguno ya ha caído ja, ja...

Más vaquitas, y esta vez muy cerca de nuestra carretera.

Y que me decís de nuestro Zimmer particular en Titisee, una auténtica granja de vacas lecheras...

... con desayuno casero incluido...

... a solo 25 euros por persona y noche?...

... sí, da que pensar, ja, ja.

DÍA 7
Titisee-Heidenheim (460 kms)

Amanecemos un tanto cansados después de una noche inquietante, pero después de un desayuno campero estamos listos para continuar ruta bordeando, esta vez, el lago Konstanz por su lado norte. Deciros que todos los pueblos que atravesamos como si de pueblos costeros se tratara, se encuentran a reventar de turistas, ya se sabe, a falta de mar bueno es un lago, y en este caso, pedazo de lago. Sabemos que en la ciudad de Friedrichshafen se encuentra el museo Zeppelin pero con las prisas, o no lo encontramos o no queremos encontrarlo, cosas que pasan...
A Füssen hay que ir por cojones, allí se encuentra uno de los castillos más espectaculares del mundo, doy fe, pero la verdad, no me se me eriza la piel... si es que tanto románico ja, ja...
Con el día concluso haremos noche en un comfortable hotel en Heidenheim, el Hotel Pöltl, y a la mañana siguiente alunizaremos en el Eurorun de Gremium MC, pero eso amigos, eso, será mañana...

Bordeando el lago Konstanz numerosos pueblos salen a nuestro paso, en Überlingen una vieja torre, antiguo acceso a la ciudad, nos da la bienvenida.

En Meersburg el lago se muestra en todo su esplendor, por un momento parece que nos encontremos junto al mar, pero no, este lindo patito nos recuerda que no le gusta la sal.

Como si se tratara de un puerto de mar los barcos atracan y desatracan constantemente...

La simplicidad de las formas y el colorido de sus casas nos recuerda que nos encontramos en una de las zonas más bonitas y amables de Europa.

Camino de Friedrichshafen nos permitimos rodar durante unos kms junto a unos motoristas de Luxemburgo, creo que también buscaban el museo Zeppelin pero ahora tengo mis dudas...

Camino de Füssen el calor se hace más inaguantable así que paradita para refrescarse y ojear mapas, nada ilegal, espero ja, ja...

Subidón de adrenalina, en mitad de un pueblecito este taller nos recuerda porque estamos aquí.

Füssen, ciudad que forma parte de la Ruta romántica alemana, pertenece al estado federal de Baviera a los pies de los Alpes...

... y en ella destaca el Castillo neogótico de Neuschwanstein. Como curiosidad comentar que este palacio sirvió de modelo a Disney a la hora de recrear el castillo de "La Bella Durmiente"...

... y como si de la bella durmiente se tratara, este carruaje hace entrada tirado por dos espectaculares equinos.

En el lago Forggensse tan solo nos refrescamos, lástima no haberlo bordeado...


DÍAS 8 y 9
Heidenheim-Hildburghausen (330 kms)

Finde de Eurorun. Nos habíamos propuesto llegar pronto y demás pero al final siempre ocurre lo mismo, te juntas con quien no debes y venga birras, templadas, calientes que más da, hermandad y buen rollo es lo importante, por eso agradecidos a esa buena gente del capítulo de Villingen que tuvimos la suerte de interceptar en ruta. Al rato hace su aparición el capítulo de Madrid en pleno y directos a Hildburghausen, allí somos recibidos por la policía que nos pide papeles de la moto y demás, realmente el pueblo ha sido tomado por las fuerzas del orden en prevención a que puedan generarse follones, y es que entre tanto motorista venido de todas partes del mundo el roce siempre puede surgir... pero no fue este el caso, fiesta, hermandad y buen rollo fueron los protagonistas, incluyendo ese partido entre España y Paraguay.

Grata sorpresa pero sobre todo muy buena acogida por parte de estos grandes anfitriones.

El capítulo de Madrid dos carpas, que coño! si es que a chulos no les gana nadie ja, ja...

... la de las fiestas fue la más visitada de todo el evento, parecía la ONU!, y el que venía siempre repetía, la hospitalidad española ja, ja.

La ubicación perfecta.

La carpa principal siempre a reventar, muchos conocidos y caras nuevas, pero no las de estas dos petardas! ja, ja, besitos...

En la ruta estaban todos.

El incesante paso de colores sobre sus monturas atraen la mirada del transeunte...

... y del obligado transeunte.

Colores de todos los colores.

En definitia un finde de mucho Rock & Roll y muy buen rollo empaquetado ya para el recuerdo...


DÍAS 10, 11 y 12
Hildburghausen-Krivoklat (República Checa) (485 kms)

Buscamos descansar de tanto ajetreo y para eso nuestra querida Krivoklat (ver A Europa Central II) es ideal, las mejores cervezas 60 céntimos el medio litro, cenas y comidas de gran calidad a mitad de precio, un entorno envidiable rodeado de bosques y montañas, pequeñas rutas por los alrededores para quitarnos el mono de moto, encuentros amistosos con la polizei, eh Pelao? ja, ja, pero sobre todo nuestra estupenda casa campera cortesía del "oso" a 10 euracos por persona y día así como los desayunos del "fritangas", todo ello aderezado con unas gotas de personajes dignos de una peli de Fellini hacen de Krivoklat nuestro pequeño refugio en los viajes por Europa, y por mucho tiempo!.

Atrás hemos dejado Alemania y el paisaje de las ciudades cambia mucho, reminiscencias soviéticas persisten todavía en el ambiente.

En Slany las formas van suavizándose y el colorido renace, merecerá una futura visita, sin duda.

Carreteras secundarias donde no existe tiempo para el aburrimiento.

Nunca nos cansaremos de rodar por estos lares, son ya muchos los recuerdos que encierra cada rincón de esta maravillosa tierra.

Ahí esta! junto al castillo.

Que os parece nuestra chocita?.

El coche no va incluido, lástima!.

Un vecindario muy tranquilo, ideal para el reposo y sobadas de once horas...

El mejor gulash solo lo encontrarás aqui...

... y despues, rutita a Rakovnik muy cerquita de Krivoklat.

La antigua torre medieval que da acceso al casco antiguo de la ciudad se encuentra en un estado de conservación envidiable, por ella se accede a la plaza Husovo, allí se encuentran los monumentos más emblemáticos de la ciudad...

Presidiendo se encuentra la Iglesia gótica de San Bartolomé, siglo XIV...

... y más adelante la columna Marian, siglo XVIII.

Fantástica panorámica de la Plaza Husovo.

De vuelta en Krivoklat nunca me había fijado en este curioso cruce de caminos...

... que te lleva directo al "fritangas" y su excelente carta a base de preparados para el más enérgico de los desayunos, almuerzos, comidas o cenas, imprescindible.

Nuestro último día en Krivoklat y como guinda visita al Museo de motocicletas Jawa y Cz. La más grande colección de motocicletas "made in Chez Republic" de todos los tiempos, allí encontraras desde modelos clásicos a prototipos únicos a cual más excéntrico, y sin olvidarnos de esa 350 cc que hizo estragos en nuestro país, os acordáis?.

A modo ilustrativo una pequeña selección de lo que allí vimos... el primer trike!.

Una bobber en toda regla, nada que envidiar a una HD.

Esta con cambio suicida, menuda tela.

Otra kamikaze.

Tremendo engendro para intentar competir con la Vespa, incluye maletero frontal.

La exposición incluye dos plantas repletas de motocicletas.

Esta para el Rey del R & R.

Muy custom para su época.

Otro engendro en colores patrios.

Para el ejército, incluye un kit muy ingenioso para esquiar sobre la nieve.


DÍA 13
Krivoklat-Berna (Suiza) (780 kms)

Iniciamos la vuelta con un traficazo en las autopistas alemanas del copón, por unas horas estamos hasta los huevos del "no limit velocity", adelantar es jugarse la piel muchas veces, van a toda ostia y con tráfico pesado resulta muy estresante, o somos nosotros? sabedores de que se nos acaban las vacaciones y todo lo bueno. En Suiza la situación no es muy diferente y encima la mitad de las autopistas estan de obras, carriles únicos, señalización a punta pala, velocidad restringida y "fotos" en los túneles hacen que tengamos que pernoctar en Berna y no en Ginebra como hubiéramos deseado, pero en fin, nuestro hotel y la victoria en futbol sobre Alemania hacen que todo lo sufrido se olvide de un plumazo...

DÍA 14
Berna-Lérida (1.080 kms)

Con la resaca del futbol arrancamos destino España...

... la jornada será fructífera en kms, nos hacía falta, sirve para demostrarnos a nosotros mismos que seguimos siendo unos tipos duros y curtidos en el arte de rodar... y además disfrutamos!.


DÍA 15
Lérida-Madrid (465 kms)

Tan solo cinco horas nos separan de casa y el calor incesante es incapaz de doblegarnos, sabemos que estamos a un chasquido de dedos de compartir todo lo vivido y experimentado con los seres queridos y ya pensando en el próximo viaje, si es que no tenemos remedio ja, ja... HASTA LA VISTA PENDEJOS!!.